domingo, 17 de mayo de 2009

con led zeppelin

muevo mis caderas
con un desconocido nombrandome
gimo
con el desconocido tocandome
muerdo mis labios
rasguño su pecho
y aumentando el ritmo
aguanto mi llanto
y lo humedesco pensando en ti...
vic
vi
vic
vi
son las silabas que emito
en cada orgasmo desde tu partir.

lunes, 23 de marzo de 2009

Para Daniela:

la mujer de brazos abiertos
y carcajadas anchas,
de lunares infinitos
y peculiaridades exiquisitas.

a la mujer de labios eternos,
por que sus palabras son un tesoro en mi memoria;
por que su inteligencia es mi caliz.


Victor Flores.

Conociendo Flores


Caminaba a mi lado
sentía su voz a medio metro
y en el oído una loca bailarina
que celebraba carnaval
aprendí primero su voz,
airoso, garbo...
luego los relieves de su rostro fulgente
ahora concuerdo hasta con sus alergias furtivas,
la mejilla es un buen primer contacto
y su aroma es un buen incentivo para seguirlo,
la fuerza de sus acciones
y la debilidad de las mías
se unieron en un comunismo ideal
(este se lleva a cabo sin dictadura)
y llega a una terminación sublime
con una entre cortada risa
y canciones de viña popular.
yo.

La Favorita y El Caballero Fantasma

Se pasean tan solitarios
Con una presencia que anula cualquier distracción
La favorita con sonrisas coquetas me declara su buena onda
El con sus paseos nocturnos me describe su desolación
La favorita es una mujer rica de curvas sabrosas y una voz sensual
El como un fantasma mira todo lo que no debe de mirar
La favorita alarga su vista con gran curiosidad
Y el caballero se intimida al quererla conquistar
El amor!
que cosa mas escondida
Que cosa por descubrir
La persona se resiste
Y el sudor se encarga de unir
Favorita es la mujer de negro que con arrugas tiernas me caga la juventud
Favorita entre mis compañeros que gozan y engordan de aparente actitud
Favorita con una cara dulce y unos senos generosos
Favorita que escribe de gueones pencas y gueones ambiciosos
Las bufandas no acompañan nada sin un abrigo largo
Escucha las campanas mientras se imagina tocando el piano
Pasea sus pies cansados y se detiene a apagar un cigarro
Con pena?
Con nostalgia?
Que piensa este fantasma ambulante que hace delirar mis preguntas
Espero que se peguen cuales perros en el acto del amor
Espero que se toquen sin un mínimo de pudor
Espero que flores llegue antes que se esconda el sol
Y espero que mi escrito tenga más de un lector.

yo.

(Eres como una pistola que observa,una pistola que comenta.
con tu mira telescopica y ojo de lince.
que gatilla?,
que palabra no inunda tu suave boca amada mia?
si el dia lo pasas preparando tu artilleria de poesia,
y yo te contemplo inundando tu aire de paisajes sin siquiera saber que lo acumulas todo en la cajita imbecil que solo a ti te hace graciosa,
que solo a ti te motiva.
puedo decir que soy espectador anhelantede tu historia y tus palabras... )
tú.

miércoles, 4 de marzo de 2009

...

he abierto mis ojos ante tí
ante un huracan de gestos y palabras.

he abierto mis ojos ante tí
y las horas pasan
como una respiración, un latido, una mirada...
cuando desentierras desde los confines de tu mente
los tesoros de la vida

tengo la impresión
de que nosotros inventamos los jueves
para reirnos un poco,
un par de besos, un café...
la gente; que me importa!
los jueves deberian tener otro nombre si tu faltas.

he abierto mis ojos ante tí
mientras las calles decoran tu presencia
y caminamos hablando de la vida,
la ciudad y sus luces son tu gran escenario
el telon gris, la multitud
y yo aplaudo cada uno de tus actos.

por fin he abierto los ojos;
musica, literatura, tus labios, ¡la vida!
en momentos exquisitos, se confunden con tu aroma, lunares
y margaritas

¿que mas puedo pedir?
dime tú,
¿que mas puedo pedir?

sabado15x2005


Victor Flores Rojas.

...

Que ejercicio metal amarte ¡dios mío!

Primero entender que es amar…

Debo admitir incompetencia en estos asuntos
No puedo desnudar las ideas de estas mariposas.
Sin embargo entiendo sus dibujos en mi mente.
Blancos y alados
Trato de seguirlos por los marcos de tus ojos.
¿Estaré en mi sano juicio?
Cuando veo más allá de mi nariz
Tus labios color fruta
Limpios y rugosos
Hablándome de amor
¡Que rudeza es esta señores!
Que se derrite como azúcar en el fuego
Que rudeza es esta que te ablanda como a mi.
Hay historias ya cerradas, tu lo sabes
Cuanta semejanza en nuestros caminos,
Terminan por unirse…
Somos impostores embaucando
Con rudezas masticables
Con fríos y peligros de juguete
Y en nuestra guarida solitaria,
Que solo nosotros conocemos,
No quitamos las caretas
Y decimos lo que somos de verdad.





Victor Flores Rojas.

domingo, 1 de febrero de 2009

faltan tus letras!

Nos conocimos unos días antes de mi cumpleaños numero 20… ese amigo fiel de la universidad que tanto querías nos presento unos días después de haber dormido conmigo… no había sido nada mas que una calentura provocada por el alcohol…. Nunca te enteraste... creo.
Creo que nadie predijo que ese jueves que nos presentaron, comenzaría el cambio de tu vida y la mía, convirtiéndose en nuestra vida.
Cuando nos presentaron hubo una pequeña atención, el uno del otro, tal vez era mera curiosidad por saber como era ese nuevo personaje tan cercano al amigo en común…
Conversamos esa noche… mientras repartíamos una charla a la pobreza y al bolsillo roto… todo tomo rumbo al momento de nombrar la literatura, y como un signo repentino se convirtió en la unión, el interés, la necesidad de comunicarnos más de lo regular. Al final de la noche como botón humilde y azul se cierra la conversación con una pregunta no respondida y recordada hasta hace algunos meses… luego nos empezó a fallar la memoria.

Así paso el misterio que tenia esta onda ancestral de un tiempo que tu y yo habíamos vivido juntos en una vieja vuelta por el mundo… un mes y pico para descubrir que no te quería ver solo los jueves… el martes podía ser mejor si te veía y que decir si un viernes bebíamos vino y salían palabras que cantaríamos al mismo son… era un lunes, don sábado, mi amigo domingo, aquel miércoles, mejores días si eran contigo…
Y entonces conseguimos ubicarnos fuera de ese día que marcaba la semana como marcaba el domingo una misa dominical. Palabras sin tiempo, que mas sabroso que eso… el mirarnos y sentir que las ganas por descubrir los misterios que cada persona guarda era lo mas importante si se trataba de los nosotros…

Tres días antes de la felicidad, me dejas ver tu debilidad y me ignoras haciendo confirmar el deseo inmenso de comenzar todo lo que se pudiera comenzar… una guerra en la que te dejaría triunfar, un torrente de aguaceros tuyos que mojarían todo de mi…
Te busque, desde ese día te busque y tu me dabas a gotas lo que yo quería en batea… invitaciones, juntas casuales, miradas, piel… todo.

Te encontré un sábado de primavera, entre rojo comunismo, canciones con color y la madrugada apresurada que desesperaba al cuerpo por el poco tiempo que hay de la noche al amanecer… susurros al oído… los labios de manera indecente jugando con las mejillas y el cuerpo que se erizaba, temerosos y excitados desembocamos en el mas tiernos de los besos… una constante rápidamente respondida surge… ¿Qué fue eso?, era todo, todo lo que buscábamos… sin perder mas horas de las pocas que quedaban, desahogamos esas ganas de reventar nuestros labios en apasionados besos que dijeran todo lo que las palabras no habían podido decir por temor a un rechazo tan poco probable.

Después de ese tan desesperado amanecer, nos fuimos a mi casa, como una niña de bien, mi madre esperaba en la ventana… solo te pude ver después de una semana… jueves, sin hablar antes, llegamos al encuentro esperando la reacción del otro… prometí besarte al llegar el día del nuevo saludo y falle, por temor, por creer que solo había sido solo una aventurilla nocturna, pero debía haberlo adivinado, tu no eras así, o al menos no serias así conmigo, y entonces esperaste a tenerme cerca y vulnerable, entre tus brazos no podía sentirme de otra manera, con tu mano levantando mi mentón ya nada se podía hacer, me habías parido, y empecé a vivir… aromas, sabores, colores, todo se volvió a inventar.

Luego no hubo instante en que el encanto se haya amilanado… tu y yo, el nuevo dueto de moda… no había mas que nosotros, éramos juntos el presente que se afirmaba del pasado, para crear juntos un futuro… la luz, la cursilería, constante sonrisa babosa eran parte de “nosotros”, palabra que desde ahora aparecerá en muchas líneas mas, cada historia que mutuamente nos dejaba conocernos acrecencia de lo que ya nos conocíamos sin necesidad de hablar… eran pan de cada día, necesarias para nuestra energía. Eso nos servia para conocer a la familia que algún día pensábamos unir… la atención, preocupación constante observación en el actuar del otro, era nuestro sistema de conocer al individuo que existía dentro de los cuerpos que tanto deseábamos…

Tu de rodillas formalizas hasta las horas, los días… llegaste con las manos llenas de compromiso, para según tu hablarle a tu madre de mí…

Un día como buenos amigos que continuamos siendo, quisimos beber, por decirlo de algún modo, casi emborracharnos. Un ron, tu y yo, la playa serena que nos daba escondites entre rocas, y la noche que con su luna ocular nos daba luz y visión a toda esa belleza que no podía creer, me pertenecía… hicimos el amor como en una película porno francesa, de aquellas con poses estrafalarias pero con tanto contenido cerebral que dentro de un orgasmo podía crear mi obra prima, una voz en off de los amantes y de sus deseos, ya no tan ocultos… y se formo la noche nuestra cama y las estrellas, las velas de una hermosa pieza al aire libre…

En el mas rico de los deseos, nos inspiramos en cartas llenas de admiración a esa provocación sexual que nos comenzamos a inducir cada vez que nuestra piel rozaba , cada beso era una aventura intelectual de todo lo que haríamos al llegar la noche y el momento de amar se hiciera inmensamente alucinante, éramos el verbo adicción.
Era tanto el amor que el defecto era ideal para amar, para decir y gritar con total aceptación… no queríamos cambiar nada de nosotros, solo un cambio de casa pronto, para poder “follar como la gente”, jerga que utilizamos hasta el cansancio, sin embargo el poeta florecía con cada carta que regalabas con un soplo de suspiros y coquetas miradas a esta mujercilla, que se declaraba tu servidora.


“PORNOFONIA”

TE CONTEMPLO ERECTO Y ESPECTANTE
CON MIS MANOS BUSCO CREARTE, COMO SI FUERAS DE ARCILLA

TUS PEZONES LOS HAGO MASA FINA, SUAVE.
FORMO TUS PECHOS CON MILBESOS LACTEOS
Y TUS NALGAS LAS DIBUJO ENTRE MIS MANOS, FIRMES

CON LOS DEDOS SEÑALO TUS LUNARES
UNO A UNO,
COMO CONTANDO ESTRELLAS;
MEMORIZO HASTA EL ULTIMO REQUIEBRE DE TUS LABIOS.

ENTRE TUS PIERNAS ME SIENTO UN CÓLON DE MARES TIBIOS
Y EN MI BOCA TU CLITORIS FEBRIL SE ERIZA.

ME LANZO ENTRE VAIVENES SUMERGIDOS,
LA LUNA TE ILUMINA COMO A UNA ANGEL.
TU COLUMNA SE ENCURVA ENARDECIDA
LOS GEMIDOS SE ESPARCEN EN EL VIENTO,
YA JUNTOS ACABEMOS ESTE LIENZO.
ENTRE UN RIO DE SUDOR QUE NOS DESGASTA.

VICTOR FLORES ROJAS.




Sonrojados nos vimos cuando caminando leí esas letras que formando figuras me provocaban y hacían de mi una quinceañera, colonizando un país de poesía que excitaba todo lo que hay dentro de la mujer que caminaba a tu lado. Así fue entonces que la escritura, nos daba las armas para hacer del amor algo tan palpable como una roca escrita, un fuego formando palabras, un viento que golpeaba nuestros rostros con la más dulces de las prosas, y un agua que inundaba tu mente regando la mejor de las poesías.

Problemas hubieron…el no poder vernos cada segundo de lunes a lunes era una tortura constante. Y llego la navidad, y las noticias de personas que yacían en el pasado, llegan dando signos de que tu y yo, nos pertenecíamos aun mas que el día anterior… te regale un lugar selecto donde guardar tus vicios y tu unos libros que habías comprado para ti… esa fue la parte que mas me gusto de tu dádiva… nuestra primera y ultima navidad juntos, tímidos y maravillados por el tiempo contiguos, seguimos adelante con una virada fuerte de columpio infantil. Fiestas de año nuevo conozco a tu familia… tú madre, y hermanos, que inevitablemente amo y veo en sus caras tu rostro fulgente.

Llega el verano tan difícil, que quemo con apoyas la vacación, que descanso pude haber tenido en dos meses si nos vimos menos que lo que podíamos soportar, llego entonces tu cumpleaños numero 24.

Que hombre, tu tan fuerte y vulnerable a la vez, un niño que se adueñaba de toda mi atención y un hombre propietario de la vida que tu me habías brindado, la libertad de amar, me hacían presa de tu accionar… éramos realmente uno. Para tu cumpleaños nos fuimos al desierto y en el descanso de la distancia que nos había infortunado, no dormimos el amanecer y provocándonos el placer máximo de la compañía, fuimos dos “babosas de campiña”.
En el viaje una distancia pequeña, provoco la única discusión de mis enamorados 408 días, fueron celos al tiempo perdido en otras presencias y una demostración de que era más que amor, era la felicidad que nos tenía en la locura por no dejarla escapar. Cuando se presentan las señales de que pudiésemos dejar de vernos, tú hablas y me vuelves a conquistar con caramelos rojos y un dulce beso que propaga tu infinita permanencia.

Marzo se hace dueño de “el premio mierda” al peor mes del año, la puta ausencia… apedazados los sueños, solo el correr de la sangre que se abrigaba cada vez que nos hacíamos presentes en recuerdos, llamadas, cartas… cualquier cosa que pudieses llevar el nombre mas nombrado, mas pensado y cantado en los últimos meses, podía acallar la angustia de no tenerte a mi siniestra.

Pero llegaste, tierno y con tantas semillas en tu puño para sembrar, feliz me fuiste a buscar para no dejarme nunca mas…
No cabía en nuestras mentes la idea de que estuviésemos llegando a la complicidad de todo lo que quedaba por vivir. Dejamos de regalar materiales que detallaban aquello que decíamos cada minuto, cuando encontramos un motel al cómodo alcance de esos bolsillos que tanto nos costaba mantener… risas, canciones, política, historia, crianzas… todo coincidía, tu palabra y la mía hacían coro en cada conversación…

Paso el tiempo y en mi cumpleaños numero 21 das un discurso hermoso, declarando ese amor inminente delante de esa sociedad que nos rodeaba, y te las juegas siendo romántico y voraz, para conseguir mis nervios de verte y darme cuenta como la sensación de sentirme amada y segura, configuraba mi destino según tus encantadores presagios, y así reírme de la vida que tantas malas bromas nos había jugado…

Dejaste la estabilidad que yo no podría darte, por quedarte a mi lado, y creando callos, calvando tu cabeza, bajando esa panza que me abrigaba, trabajaste. Planeabas todo para dos… casa, anillos, boda, hijos y viajes de vejez…

Una tarde de noviembre te llevo pan amasado, te beso sin levadura, y aun si tus labios tan dulces me sueltan una armoniosa declaración de amor…
Camine tranquila pensando en lo apetitoso que te veías, jamás creí que sería la última vez…la ultima vez de escucharte decir te amo, de verte sonreír, y de conversar mi mala maniobra con el pan… sabias tanto, verte fumar el ultimo cigarro y acompañarte en ello, solo enfada mi mediocre acción, debí haberte raptado y escondido bajo mi regazo, por que así como tus alergias, cualquier cosa que te pasara en mi ausencia, seria mi culpa.

Entonces llega esa Perra noche en que te esmeras a salir sin decir ni una puta palabra a la mujer que te esperaba la tarde siguiente…Y que gran vació en la historia, aun no se que chucha paso…

Te espere… y no llegaste, y corrí, y te busque, y luego con gente a la cual no recuerdo ni su rostro, tuve que despedirme por que no te podían dejar conmigo, pero que sabían ellos… no entendían que tu querías estar conmigo? Acaso no se los dijiste?, me obligaron a que mi ultimo adiós fuera un discurso fúnebre… tan finito.

Ha pasado poco mas de un año, una mierda de año, sola lidiando con mi demencia, a medias sin tener mi segunda opinión, ahora estoy propensa a las equivocaciones, ya no hay antitesis, solo una corriente idea sobre lo que creo debo hacer para respirar sin ventilador, mira que aquí abajo el aire espesa hasta mi caminar… no pensé que esto costaría tanto, el terminar…y no hablo solo de la mermelada que termina siendo tan ácida, casi perdiendo su dulzor, hablo de terminar sola la historia que prometimos hacer los dos.